Desde comida mediterránea, hasta vitamina D: los hábitos que mejoran la fertilidad

Cuando el diagnóstico de infertilidad llega, muchos son los que se preguntan qué hicieron mal y cuál es el problema que tienen que no los deja cumplir el sueño de convertirse en padres. Lo cierto es que por más deseo que se tenga, si la persona tiene un problema físico o mental que le impide llevar a cabo la concepción, ese embarazo lejos estará de llevarse a cabo.

Es normal en las consultas de reproducción asistida que los pacientes pregunten qué pueden hacer para mejorar su salud y acrecentar las chances de un embarazo, y la realidad es que si bien muchas soluciones se obtienen con tratamientos, también hay hábitos que se pueden incorporar para mejorar.

Una de esas prácticas tiene que ver con mantener un buen descanso, y con realizar actividades que resulten placenteras, algo que quizás es más fácil de llevar a cabo durante el verano, donde las temperaturas son más agradables y los días más largos.

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La importancia de la vitamina D

Además, cuando los días son más lindos, la gente se predispone a realizar actividad física al aire libre y a tomar sol, lo que aporta vitamina D, y resulta beneficioso para mejorar la fertilidad.

“La vitamina D es importante para muchas de las funciones del cuerpo (como la piel, los huesos y el cerebro). En el campo específico de la fertilidad, influye en la implantación y en el desarrollo posterior del embrión. Las personas en general suelen tener dosis bajas de vitamina D, en esos casos hay que suplementarla. Puede ser con la toma de sol, siempre con protección, y sino con medicación vía oral”, explicó la doctora Doris Raso, especialista en medicina reproductiva de WeFIV.

De hecho, según la experta, la vitamina D podría ayudar a evitar el síndrome de ovarios poliquísticos, la endometriosis y la miomatosis uterina; condiciones que causan infertilidad. Por otro lado, también disminuye complicaciones durante el embarazo como pueden ser la preeclampsia, diabetes gestacional y bajo peso del recién nacido.

De igual modo, aunque no está comprobado médicamente que exista alguna comida que pueda mejorar la fertilidad, en verano se recomienda llevar una dieta mediterránea que incluya frutas, verduras, pescado y grasas buenas.

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También es necesario tener una buena hidratación, descansar bien y evitar, de ser posible, las temperaturas extremas y el alcohol. Así las chances de lograr el objetivo de ser padres son mucho más altas, ya que una buena conducta mejora cualquier tipo de tratamiento que se inicie.

La importancia de mantener espacios de ocio y distracción

Cuando una pareja busca formar una familia y el bebé no llega, es habitual que la ansiedad, el miedo, la preocupación y la bronca aparezcan, y aunque resulta casi inevitables sentir ese torbellino de sensaciones, lo cierto es que no resultan para nada buenas para encarar un tratamiento.

“La búsqueda del embarazo que no llega suele ser el ´monotema´. Por eso, las otras actividades que generar bienestar afectan positivamente a las personas para poder encarar un proyecto como el de un tratamiento de la mejor manera posible”, dijo la licenciada María Villamil, jefa de la Unidad de Apoyo Emocional de WeFIV.

“A pesar del contexto actual de pandemia, en general, durante las vacaciones hay más espacios de encuentro con la familia o amigos, por lo que suelen tener lugar momentos de ocio que disminuyen el estrés y eso repercute de manera positiva en la calidad de vida de las personas”, agregó la especialista.

Incluso, en época de vacaciones y de verano, es normal que se retomen actividades que con la rutina quedan relegadas, y por eso, muchas de ellas son buenas conservarlas durante el embarazo. Hacer actividad física, mantener hobbies que generen placer, y tener otro tipo de proyectos además del de ser madre/padre, es de suma importancia para el bienestar y la calidad de vida de las personas.

Así que, aunque no existan recetas simples y mágicas, es necesario mantener ciertos hábitos y costumbres saludables, tanto en lo que respecta a la alimentación como a la salud mental, para mejorar la fertilidad y hacer crecer las posibilidades de un embarazo.

Fuente: BigBangNews