El pasado martes 16 de noviembre los oficiales de la policía que llegaron hasta una vivienda de Villa Urquiza se encontraron con el cuerpo sin vida de una joven de 17 años, quien permanecía en compañía de un amigo. Se trataba de Lola Lourdes Nieto Villares, quien minutos antes de las 20 le había enviado un mensaje a su mamá para decirle que la esperara para cenar. Sin embargo, la adolescente nunca llegó.
Según se pudo reconstruir, antes de la comida en familia, un joven conocido de los Nieto Villares llamó a los padres de Lola para decirle que pidieran una ambulancia urgente porque la chica había convulsionado, aunque no le dio más detalles.
Cuando la mamá de la víctima arribó a la casa ubicada en Mariano Acha al 1000, en Villa Urquiza, se encontró con policías y ambulancias en el lugar, quienes llegaron hasta allí después de que el personal de la Comisaría Vecinal 15 C de la Policía de la Ciudad recibiera el aviso de que la joven estaba mal de salud.
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El parte policial indica que cuando llegaron hasta la casa, se encontraron con el dueño de la casa, y que les dijo que estaba en compañía de una chica que tenía convulsiones. Por esta razón, los efectivos solicitaron al personal del SAME, que luego de realizarle maniobras de RCP a la menor, constató su fallecimiento.
“Yo creí que era un bajón de presión, nunca me imaginé que mi hija estaba muerta”, admitió entre lágrimas Vanesa, mamá de Lola, en diálogo con TN.